Carlos Mallaviabarrena, escritor pehuajense radicado en Tigre, publicó un libro de cuentos y poesías relacionados con su vida en Pehuajó. “Historias de cuando fui niño, joven y feliz” dijo, para señalar que aprovechó el tiempo libre que le da la jubilación, para escribir que es su refugio. Aseguró que tiene un conocimiento acabado de Pehuajó, porque aunque se fue hace mucho tiempo, “siempre estoy volviendo” dijo.
A modo de presentación del libro, el escritor mencionó el texto “No me olvides”, un cuento que hace referencia a quienes vieron llegar al verdulero Vacaluzo en un carro, a Kleiber vendiendo kerosene, a José Vasco Inciarte llevando la leche cruda en el carro, casa por casa.
Mallaviabarrena recordó además que trabajó también por la identidad pehuajense, cuando se comunicó con su sobrina Andrea siendo Secretaria del Cultura, para pedirle que recuperen en Festival Nacional de Folklore Surero tal como fue en sus orígenes, y la ayudó por muchos años en el armado de cada grilla. Manifetsó que la identidad pehuajense está algo corrida de eje u olvidada, y bregó porque se recupere, con el canto surero de la cuna de José y Rafael Hernandez; con el canto que surge del campo, del puestero, de la tarea rural, de la ganadería y de la agricultura que surgió después.
Mallaviabarrena contó que también hizo una zamba con relatos sobre Pehuajó, y aseguró que espera con ansias la posibilidad de presentar su libro en esta ciudad, indicando que ya está disponible en Librería Sancho, para quienes quieran leerlo y disfrutarlo.
Finalizada la entrevista, Carlos Mallaviabarrena pidió hacer público el agradecimiento especial a su amigo personal Alberto Cosentino, quien lo contactó con un familias directo de José Vasco Inciarte, que envió una nota escrita con muchos detalles de su trabajo en esa época, facilitando la redacción del cuento que lo menciona.