Una vecina de nuestra ciudad, Edith Rolón, contó detalles de una historia marcada por extrema violencia con su ex pareja, quien afrontará un juicio la semana próxima. Relató que en un momento empezó a estudiar en el Instituto y en contacto con sus compañeros y docentes, entendió que su relación no era normal y que sufría violencia por parte de su pareja. “Las que sufrimos violencia normalizamos lo que pasa, hasta que nos damos cuenta” dijo, y agregó que tuvo varios intentos de separación, hasta que decidió poner fin a la relación, y las cosas fueron peor. A días del cumpleaños de 15 de una de sus hijas, la ex pareja la llamó para ofrecerle dinero para la fiesta, fue, hablaron u todo era normal, hasta que cuando quiso irse él la tiró a la cama y la violó. Dijo que esto había pasado muchas veces, aun estando juntos, ya que él la obligaba a tener relaciones aunque ella se negara. Recordó que una vez, ella cruzo en la calle a un hombre que abusó de ella en su infancia, llegó a la casa y se encerró en su habitación, tomó una botella de una bebida alcohólica y se durmió; sus hijas se asustaron a llamaron a su ex pareja quien se ofreció a cuidarla, pero volvió a abusarla, y cuando las nenas se acercaron para saber por qué gritaba, él aseguraba que estaba soñando.
La pesadilla continuó cuando en una audiencia por esa situación, se le tomó declaración a sus tres hijas y cuando fue el turno de la menor, le pidieron que se retire de la sala y minutos después la fueron a buscar, le recomendaron que mantenga la calma y “entré y veo a mi hija llorando, me pedía perdón y yo no entendía nada” dijo y continuó señalando que la nena se animó a denunciar que también fue abusada por la misma persona, el hombre que su madre eligió como pareja cuando ella tenía poco más de tres años, y los hechos ocurrieron entre sus 11 y 14 años de edad.
Edith Rolón contó además que el día que decidió terminar la relación, recibió tantos mensajes que decidió apagar el teléfono e ir a la casa de un compañero; cuando prendió el teléfono tenía muchos mensajes de su familia, en los que le avisaban que alguien había intentado entrar a su casa. De inmediato fue hacia el lugar, llegó alrededor de las 1,40 de la madrugada y pocos minutos después, escuchó tres disparos. Con las pericias se determinó que uno iba a su cabeza y el otro a la de su hija, ese impactó en el cuerpo de Edith que debió ser sometida a una cirugía. Hubo un tercer disparo que no se determinó a quién iba dirigido, pero en ese momento había tres personas en la casa.
El agresor está libre, su familia hostiga permanentemente a Edith, y del 23 al 25 de septiembre se realizará un juicio por jurados en Trenque Lauquen por las agresiones a la mujer, luego vendrán las demás causas.
Edith agradeció a sus compañero y docentes del Instituto por el acompañamiento, y al grupo Yo te creo de Trenque Lauquen, que la acompañaron, la sostuvieron y la alentaron a dar esta durísima batalla.