Fabiana Pignanelli se expresó en representación de las compañeras agredidas que hoy no pueden alzar la voz, destacando el acompañamiento de todos los docentes que estuvieron y apoyaron en el momento, la reacción inmediata de los gremios, la Prosecretaria de la Escuela que estaba en el momento, y a los padres, que siguen confiando en que la escuela es pública y que las docentes están para enseñar y no para violentar.
Marcela Casas aseguró que este no es un episodio aislado, que siempre ingresan personas a agredir y maltratar a los trabajadores, y aseguró que no es un tema en contra de los niños sino de la violencia de una madre que agredió a su maestra frente a todos los niños. Solamente hoy se visibiliza una cachetada, pero es necesario que se sepa que todos los docentes de todos los niveles están expuestos al mal humor de algunas familias inadecuadas, mientras que la mayoría de las familias los apoyan. Aclaró que no fue a una docente la agresión sino a dos, Nancy fue la más golpeada pero Yamila también fue agredida, y pidió que esto no suceda más en ninguna escuela del país, con docentes que representan a la educación argentina. “Pedimos que nuestro rol sea dignificado como antes” dijo.
Finalmente, Féliz Badany, docente participante en la marcha, dijo que como docentes eligieron la segunda casa, que es la escuela; el guardapolvo como herramienta y el combustible el corazón; ye invitó a estar unidos para ser escuchados. Agradeció a todos la presencia, bregó porque nunca más se toque a un docente e invitó a todos a cantar el Himnao a modo de cierre de la manifestación.
